Os presentamos a Samantha, una enfermera muy puta que le encanta follar con sus pacientes en cualquier lugar del hospital. Esta vez le toca a Ramón, un soltero de 34 años, vicioso del sexo, que va a realizar una consulta médica. Para empezar con el jueguecito, Sam comienza la revisión desnudándose y cojiendo la polla de su paciente para comprobar el estado de su polla. Para ello, se la chupa lentamente. A continuación, Sam le obliga que le coma sus enormes y jugosos pezones, donde, una vez, estén firmes sus tetas, situará su polla entre ellas y empezará a frotar, haciendo una buenísima paja cubana que acabará con una gran corrida de lefa por todo su cuerpo y cara. Una cura muy saludable contra las vergas descontroladas y con ganas de meterlas en cualquier sitio. ¿Te atreves con Sam, la enfermera puta?.